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5 minutos con… Lea, operadora de oleaginosas

October 9, 2018

El polo, cuenta Lea Siboni, operadora de oleaginosas en Louis Dreyfus Company (LDC), es uno de sus mayores placeres en la vida. Pero también le enseñó muchas habilidades útiles que aplica en su trabajo.

“Las operaciones de oleaginosas son realmente un trabajo de equipo”, afirma esta joven mujer de origen francés. “¡Y lo mismo ocurre con el polo!”, sonríe. “Antes de un partido, definimos una estrategia, planificamos y analizamos los puntos fuertes y débiles. Eso es lo que me encanta de este deporte”.

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Acostumbrada a cabalgar desde que era muy pequeña, Lea había pensado ser veterinaria. Pero, con el tiempo, le interesó la ingeniería y decidió estudiar agronomía en la Universidad de Nancy. Hacia el final de sus estudios, viajó a través de un programa de intercambio a la Argentina, donde terminó incorporándose a LDC en 2010, primero como pasante y, más tarde, como operadora de oleaginosas.

LDC es un actor dominante en el rubro oleaginosas. Origina, maneja, almacena, transforma y comercializa una amplia variedad de productos. Un buen operador, dice, debe contar con una buena comprensión de todas las etapas de la comercialización, desde la originación hasta el destino, y superar los desafíos de ejecución operativa a lo largo del camino. Y todo ello “tratando de entender la imagen más amplia para poder posicionar a la empresa en consecuencia”.

LDC Argentina era el lugar perfecto para aprender estas habilidades: “Estás muy cerca del negocio, la originación, los agricultores y los socios, por lo cual tienes la oportunidad de aprender un poco de todo a la vez”.

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Fue transferida a Ginebra dos años y medio atrás, donde sus responsabilidades profesionales crecieron considerablemente. Como con el mundo del polo, con las operaciones de oleaginosas, Lea se incorporó a un ámbito que tradicionalmente era masculino.

“No es ningún secreto que no haya tantas mujeres operadoras. Así como no hay tantas mujeres que juegan al polo”, dice Lea. “Pero por alguna razón, es allí donde me ha llevado la vida”.

Lea encuentra muchos paralelos entre su deporte favorito y su vida diaria, pero está claro que la toma de decisión calma, informada y segura es una parte significativa de su trabajo. Su profesión a menudo es asociada a altos niveles de adrenalina, pero ella tiene su propia visión sobre su rol.

Cuando le pedimos que describa un día estresante en su posición nos dice: “Cuando muchas cosas salen mal”.

“Pero sabía eso cuando asumí este rol, y ser consciente de que es una parte normal de mi trabajo es lo que me mantiene calma”, explica. “Me enfoco en cómo resolver el problema con la mínima pérdida de dinero”.

Hace un tiempo, este año, Lea recibió una llamada de la Federación Europea de Polo, preguntándole si querría unirse al equipo francés en el primer Torneo de Polo Europeo Femenino.

Pocos pensaban que el equipo francés llegaría lejos en la competencia. No habían tenido la oportunidad de practicar mucho en conjunto. Y de las cuatro integrantes, sólo una, la capitana, era realmente una jugadora profesional. Nuevamente, la estratega y el trabajo en equipo compensaron.

“Tuvimos suerte de entendernos unas a otras muy bien en el campo”.

Y realmente mucha suerte: su equipo obtuvo el segundo puesto en el campeonato, luego de jugar cuatro partidos en sólo diez días.

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